Tras el decepcionante empate con Canadá, este domingo el Tri se reivindicó con la afición en el Estadio Azteca; goles de Córdova, Funes Mori y Chucky.
Triunfos y goles son amores. Lo que tanto se pidió de la Selección Mexicana en este 2021 por fin apareció en el Octagonal rumbo a Qatar 2022 porque este domingo vencieron categóricamente 3-0 a Honduras ante unos 60 mil asistentes en el Estadio Azteca, que cambiaron el infame grito homofóbico por el cántico de "El Chucky Lozano", el consentido y autor de la cereza del pastel. El mejor -por amplio margen- del tridente soñado junto a Raúl Jiménez y Tecatito Corona, Hirving fue el más insistente como hace tres días en el empate ante Canadá y de hecho estuvo muy cerca de anotar en la jugada que derivó en el gol de Sebastián Córdova. El del Napoli remató de derecha y le sacaron la pelota casi en la línea, pero el mediocampista del América no perdonó y con un cañonazo comenzó la fiesta.
Sin parecer emplearse a fondo porque Honduras jamás probó a portería y Memo Ochoa pudo haberse quedado en el vestidor los 90 minutos, el Tricolor del Tata Martino pudo irse con mayor margen de ventaja al descanso con acciones de Lozano y Jiménez, el primero detenido por el portero Luis López y el segundo negado por el palo. En el complemento todo se puso a modo con la expulsión del capitán catracho, Maynor Figueroa, tras una dura patada a Raúl, a quien se le sigue negando el gol. Pero fue su sustituto, Rogelio Funes Mori, el que sí encontró portería para el segundo de la Selección y así acallar los abucheos al naturalizado en su ingreso a la cancha.